El concepto "paranoico" puede tener muchas versiones, de la más estrictamente psicológica a la que decimos habitualmente en forma popular y al alcance de todo el mundo. De hecho, creo que estamos confundiendo conceptos muy distintos. Antes de dejar que las emociones que nos provocan algunas situaciones se desencadenen con toda su furia y contenido, asegurémonos que son ciertas, y si no es así, tomémonos un tiempo para reflexionar y estar del todo convencidos respecto a lo que creemos que vemos.
Lo digo, porque podemos malinterpretar y de que manera, hechos que no tienen nada que ver con la realidad.
Para que luego digan que la realidad supera a la ficción. En este ejemplo, la ficción es la auténtica protagonista, y podréis comprobar lo equivocados que podemos estar al prejuzgar a una persona por sus acciones.